Reseñas
TSN nº 14, 2022. ISSN: 2530-8521
LA DEMOCRACIA PARITARIA EN AMÉRICA LATINA
Beatriz Llanos
Abogada. Experta en temas de democracia y género en América Latina (Perú)

Emilia Pardo Bazán

Título: La democracia paritaria en América Latina
Autora: Irune Aguirrezabal Quijera
Editorial: Marcial Pons, Ediciones Jurídicas
y Sociales
Año de edición: 2021
ISBN: 9788413812151

La democracia paritaria en América Latina. Tres dimensiones explicativas, de Irune Aguirrezabal Quijera, es el resultado de una investigación que busca comprender las características, dinámicas y causas a la base de la movilización en torno a la paridad política en una región con fuertes resistencias por su arraigada cultura patriarcal y con un grave déficit no solo en la ciudadanía política de las mujeres, sino también en su ciudadanía social. Aporta así una perspectiva aún más amplia y compleja de lo que ha significado el recorrido latinoamericano en la búsqueda de efectivizar la igualdad sustantiva en el ejercicio de los derechos políticos de las mujeres. Y aborda lo que podrían ser futuros enfoques y estrategias de cambio, de modo que dota a la investigación de un aterrizaje en la praxis de las políticas para avanzar en paridad, como herramienta hacia una democracia paritaria, entendida como sistema político, construyendo, por tanto, un diálogo virtuoso entre academia y acción.

Irune Aguirrezabal plantea un análisis cualitativo tridimensional, circular (y por tanto no lineal), de lo que denomina el «proceso paritista» (p. 40) en la región, en alusión al proceso de lucha por la paridad francés, que también nos lleva a evocar —hay que decirlo— al movimiento sufragista, génesis de las luchas por la igualdad de las mujeres en el siglo XX. Dicho análisis se estructura a partir de tres aproximaciones, delineadas en tres capítulos. Una primera de carácter conceptual donde se desgrana el concepto de igualdad sustantiva haciéndolo dialogar con las construcciones teóricas sobre la ciudadanía, desde una mirada crítica anclada en la teoría política feminista. Ello permite a la autora plantear las limitaciones de abordar de manera aislada la ciudadanía política sin antes resolver el ejercicio pleno de una ciudadanía social, las diferencias entre lo que es la paridad y la democracia paritaria, un concepto que amplifica tanto los ámbitos de ejercicio de los derechos (lo público, pero también lo privado) como los deberes del Estado al respecto.

Además, la figura del «viaje de conceptos» (p. 44) le permite ofrecer una mirada comparada previa de la evolución de la paridad en países europeos que —en su contexto original— varían entre modelos centrados en la representación política y otros más integrales. La cual enlaza con el segundo capítulo, donde se aborda el desarrollo evolutivo (progresivo y polivalente) del concepto de paridad en América Latina, para lo cual se brindan diagnósticos cuantitativos de la presencia de las mujeres en el poder en la región; un análisis del aterrizaje legislativo en los países y un aporte central: la sistematización de debates y discursos en foros nacionales. Su centralidad radica en que el análisis de datos y legislaciones, siendo importante, no puede recoger por sí mismo la multidimensionalidad de un proceso que ha aprendido de la experiencia acumulada, que se ha ido retroalimentando y enriqueciendo en una dinámica de construcción colectiva, sinérgica y no ajena al ensayo y el error. Y que, como toda propuesta de cambio del statu quo, implica resistencias.

Tema, este último, que se aborda en el capítulo tercero, a partir de la descripción de una tensión entre agentes movilizadores del avance paritista (por emplear los conceptos ofrecidos por la autora) y dichas resistencias. Respecto de los agentes se aporta una tipología y enumeración en una composición de actores «compleja y poliédrica» (p. 25) en la que destaca un movimiento feminista y amplio de mujeres que, actuando como red (y también como red de redes), ha hecho de la ciudadanía política un eje de actuación convergente a pesar de sus intereses diferenciados en otros temas. Respecto de las resistencias, es importante destacar que, además de sistematizar resistencias hacia la paridad en términos político-electorales que han sido investigadas en la región, esta investigación abre nuevas líneas relacionadas con el análisis de la cultura y la construcción de la ciudadanía. Irune Aguirrezabal hace especial énfasis en lo fundamental que es señalar los déficits en estos ámbitos que impiden alcanzar una igualdad sustantiva: la cultura patriarcal, el reto inacabado en la región de dotar a las mujeres de una ciudadanía social plena que las habilite para el ejercicio de otros derechos y los contramovimientos.

Este enfoque integral ofrece a América Latina un abordaje singular y conclusiones que constituyen importantes contribuciones para avanzar más allá de los notables incrementos en la presencia de las mujeres, tan importantes como incompletos en tanto no se traduzcan en una representación paritaria de resultado, pero también sustantiva en relación a los intereses de las mujeres y sus derechos. Además, el libro de Irune Aguirrezabal lanza la propuesta de ser audaces y transitar desde el concepto de paridad en la representación política hacia un concepto de democracia paritaria en la que un estado de bienestar y feminista garantice, a través de políticas, la igualdad real para las mujeres no solo en la ciudadanía política, también en lo económico, en lo privado y en lo social como algo consustancial. «Lo social es paritario y es democrático», afirma (p. 48).

Finalmente, este libro brinda a otras regiones la posibilidad de conocer en profundidad los cambios que se están produciendo, las evidencias y los debates sociales, académicos y políticos que se han generado en América Latina vistos de la mano de una autora que ha sabido traducir su propia experiencia como observadora participante (a través de su trabajo en un importante organismo multilateral) en una participación observada ahora desde la riqueza y la rigurosidad de su análisis académico.

TSN nº14, 2022. ISSN: 2530-8521