:: TRANS 27. RESEÑAS. Págs. 271-275 ::
Pamela Beattie, Simona Bertacco y Tatjana Soldad-Jaffe (Eds.)
Londres, Routledge, 2022, 201 pp.
María Jesús Fernández Crujeiras
Universidad de Granada
ORCID: 0009-0006-8469-3095
Time, Space, Matter in Translation, publicado en 2022 por la editorial Routledge como parte de su sección especializada en nuevas alternativas y disciplinas para la investigación traductológica —New Perspectives in Translation and Interpreting Studies—, pre- tende ofrecer al lector especializado conocimientos de numerosas disciplinas profesionales y académicas utilizando las bases teóricas y procedimientos conceptuales de la traducción. Estos conocimientos son estudiados por primera vez con pretensión no solo humanística, sino también con intención de activar conocimientos interdisciplinares que faciliten la comprensión a nivel global de la influencia humana en diversos ámbitos, tanto naturales y artísticos como filosóficos, entre otros. Este volumen pretende, gracias a la conjunción de conocimientos ajenos al ámbito de la traductología, conceptualizar y estructurar nuevos estudios, en esencia postraductológicos, tratando como objetos de análisis medios abstractos como son el tiempo, los espacios, tanto mentales como geológicos, y la materia, cambiante y bajo la influencia de la actividad humana. Para poder estructurar los análisis tal y como estos se plantean, surge como término y concepto central a la obra el de “hábitat de traducción”, que resulta aplicable a cualquier otra disciplina tradicional. Además, tal y como se establece de manera explícita en la introducción al volumen, esta compilación de ensayos meramente utiliza la traducción como instrumento a través del cual estudiar conocimientos y los procedimientos que lo conforman, sin priorizar una u otra disciplina sobre la otra, ofreciendo así un estudio equilibrado e innovador sobre la traslación de conocimientos y cómo se accede a los mismos.
Cada ensayo está redactado centralizando diferentes ámbitos de investigación: humanístico, científico y artístico. Estos artículos se resumirán brevemente a continuación, puesto que se considera que la descripción individual de cada uno es relevante para la evaluación de la monografía en su totalidad, dada su temática y planteamiento. El volumen está editado por Pamela Beattie, catedrática de estudios medievales en el Departamento de Humanidades Comparadas de la Universidad de Louisville, en EE. UU.; Simona Bertacco, doctorada en estudios poscoloniales en la misma universidad y Tatjana Soldat-Jaffe, profesora de lenguas modernas y lingüística en la Florida State University, también en EE. UU. El prefacio, “Thinking Translationally”, presentado por la doctorada de la Universidad de Concordia Sherry Simon, estructura y plantea por primera vez el marco teórico y de acción general: el pensamiento traductológico como estado consciente, fluido y dinámico que permite percibir la inestabilidad intrínseca de aquellos elementos cuyo estado cambia hacia nuevos estados de existencia. Simon argumenta que la traducción cambia en forma y contenido continuamente, alejándose en ocasiones de su concepción tradicional y buscando en sus métodos los límites del propio objeto de estudio. Esta nueva perspectiva sobre la traductología como disciplina académica flexible permite el estudio de conocimientos diversos legitimando la configuración abstracta de los mismos. A lo largo de los doce capítulos que conforman este volumen, el análisis multidisciplinar planteado —más o menos alejados conceptualmente de los estudios traductológicos tradicionales— cuestiona los mecanismos de transferencia, creación e interpretación de contenido y conocimiento de manera interdisciplinar y no-jerarquizada.
La introducción, con autoría de las tres editoras del volumen, resalta y pone énfasis en la concepción de la traducción como herramienta interdisciplinar, que se conforma de numerosas y diversas líneas de pensamiento y, por lo tanto, cambia y se adapta. Consideran que la traducción es como una placa de Petri en la que las ideas de cualquier tipo, pueden ser examinadas y desarrolladas. La traducción se convierte en hábitat de estudio en sí misma. El primer capítulo, “Translation, ecology, and deep time”, de Michael Croning, pretende considerar la acción humana como fuerza natural que afecta a la historia geológica planetaria. Para realizar este análisis, Cronin considera el tiempo como elemento central del proceso de traducción, buscando integrar el novedoso concepto de deep time al mismo. Para esto, crea tres variaciones del proceso traducto-geológico: la geotraducción, la terratraducción y la traducción nuclear. El segundo capítulo, “The experience of translation”, de Vicente L. Rafael, profesor especializado en Historia del Sudeste Asiático, busca explorar la posibilidad de la traducción como una red continua de comunicación tanto de dinámicas de poder y conocimientos subalternos, más allá de ser una reinvención estática del original. Para esto busca y explora mediante el concepto de alteridad, en primer lugar, la realidad del ser relacionada con el Otro —como elemento abstracto—. A continuación, analiza la relación entre la traducción y las dinámicas imperialistas, centrándose en la cultura criolla. Tras esto, relaciona a modo de conclusión, lo debatido anteriormente con el autoritarismo. El tercer capítulo, “Translation Degree Zero”, de Rita Raley, profesora de literaturas comparadas, se centra en la automatización del proceso traductor mediante la identificación de patrones entre una lengua y otra. En su desarrollo de esta reflexión, también argumenta que existen en este tema numerosas evaluaciones reflexivas tanto sobre la calidad de la traducción como sobre la realidad multidireccional de la misma, que puede resultar anulada. El cuarto capítulo, “Translating Plants: A starting point”, resulta profundamente innovador, ya que se aleja de los estudios culturales y explora nuevas realidades biológicas y naturalistas. Escrito por Hedwig Fraunhofer, profesora de la Universidad de Georgia, argumenta que se puede realizar una traducción intersemiótica de los signos no verbales producidos por las plantas, alejándose radicalmente del antropocentrismo que ha configurado históricamente los estudios de traducción y lingüística. La traducción biológica, según la autora, precisa de un método mixto “post-disciplinar”, que permita el estudio político, ético y científico conjunto de la misma. Para esto, hace énfasis en las teorías filosóficas de Gilles Deleuze y Félix Guattari, así como el concepto de la red simpoiética. Según nombre Fraunhofer, la traducción ontológica relacional sería beneficiosa para tratar la soledad que sufrimos como especie, nacida del excepcionalismo humanístico. El siguiente capítulo, “Translation, language meaning and intentionality”, por parte de Tatjana Soldat-Jaffe, una de las editoras del libro, plantea la problemática de la subjetividad del traductor, así como la intencionalidad del mismo en su labor durante la globalización. Soldat-Jaffe concluye que la traducción no es una mera transferencia entre textos, por lo que siempre es un acto de interpretación. La cultura y el lenguaje son elementos inestables, por lo que el proceso de traducción no solo es perpetuo, sino que además los resultados estarán siempre regidos por la propia subjetividad del traductor. En el ecuador de esta monografía aparece el artículo “Somatic Metaphors and Retranslation”, de Lisa Ryoko Wakamiya, profesora de lenguas modernas de la Universidad de Florida. Utilizando como herramienta de análisis la obra de Cervantes, Ryoko Wakamiya explora la utilización de metáforas tanto funcionales como metalingüísticas durante el proceso traductor.
La segunda mitad de los ensayos de este volumen comienza con la aportación de Reid Gómez, “The story processs: Writing translation”. Gómez, académica multidisciplinar especializada en temáticas relacionadas con el género y la raza, explora la traducción como elemento narrativo para los pueblos indígenas del continente americano, y diferentes modelos de su funcionamiento. Tras este ensayo, y continuando la temática indígena, “Shifts in semantic souls, transmigration of meanings. From a Mendicant toward a Maya theory of translation”, del autor Garry Sparks, busca los límites de la proporcionalidad de la traducción entre las fuentes y los receptores. Garry Sparks es profesor del Departamento de Religión de Princeton, y está especializado en la producción teológica de los pueblos indígenas desde una perspectiva etnohistórica. Sparks argumenta que en la cultura K’iche’an Maya, la traducción se conceptualiza a través de retórica difrástica como un cambio o renarración del mundo, de acuerdo con los conocimientos de la antropología teológica maya. El noveno ensayo, “Foreignizing the nation. Fletcher and Massinger’s translation of Cervante’s Immigrants in The Custom of the Country”, de Zainab Cheema, profesora de Literatura Antigua, busca explorar cómo se traducía el concepto del inmigrante durante la primera época de la imprenta en Inglaterra. Partiendo de la base de las “zonas de traducción” establecidas por los intercambios culturales anglo-españoles de principios de la Edad Moderna, se investiga la figura del morisco y de otras representaciones de individuos de diversas religiones y culturas, siendo estos a menudo personajes marginalizados. También se estudian los procesos de autoconcepción como extranjero y la sexualización de estos individuos. El siguiente ensayo también cuenta con la autoría de una de las editoras del volumen, Simona Bertacco, y se denomina “Translatio and migration”. Este busca explorar el proceso traductor desde un punto de vista ajeno a lo lingüístico, utilizando el término medieval translatio para intentar estructurar las genealogías ocultas tras el acercamiento tradicional a la traducción como acción textual. Realiza esta reflexión utilizando la terminología relacionada con la inmigración como instrumento de trabajo. A continuación, y aproximándonos al final del volumen, “An alphabet inventor”, de Evelyn Nien-Ming Ch’ien, escritora especializada, explora la vida y obra del artista francés Jacques Villeglé, inventor del letrismo y cuya obra exploraba las formas de expresión y los límites entre ideología y narrativas culturales a través de diferentes modelos de creación artística. Pamela Beattie, también editora del volumen, presenta a continuación “Thomas Le Myésier’s Breviculum as a ‘Translation Site’”. En su estudio del Breviculum, un manuscrito del siglo xiv que antologiza la obra del mallorquí Ramón Llull, Beattie pretende desdoblar todas las maneras de comprenderlo en su totalidad: como objeto histórico, como narración visual de la obra del autor, como traducción a través de miniaturas y como espacio de encuentro entre diferentes comunidades de conocimiento. Por último, las tres editoras de este libro, Beattie, Bertacco y Soldat-Jaffe, presentan un resumen de las estrategias utilizadas y de sus propósitos en el artículo “A collaborative model of research”. Como su propio nombre indica, las autoras conceptualizan la existencia de nuevos modelos multidimensionales de traductología que eviten las narrativas selectivas y prescriptivas tradicionales. Argumentan que, tal y como se demuestra en los capítulos de esta monografía, la traducción y sus métodos abarcan más que el nivel textual y lingüístico, sino que configuran redes de comunicación prácticas más allá de las diferencias entre idiomas.
Time, Space, Matter in Translation es un volumen completo, puesto que afronta diferentes categorías, algunas muy alejadas de la propia traductología, e innovador, ya que la propia reflexión acerca de estas disciplinas académicas tomando los diferentes métodos traductores como perspectiva antropológica basal da lugar necesariamente a nuevas observaciones y posibles áreas de estudio para el futuro del sector. Pese a tratarse de una monografía de amplia extensión y enfocada a un público con alto nivel de especialización en el ámbito común que le da cohesión, al estar constituido de ensayos individuales temáticos, con una extensión y estructuración interna clara y diferenciada, es una lectura compleja pero accesible a lectores con intereses similares, aunque su grado de especialización sea menor. Esta obra es, ante todo y como bien expresan sus editoras especialmente en el último artículo conjunto, un espacio de comunicación y conversación interdisciplinar que pretende cuestionar y afrontar las dinámicas culturales de poder que estructuran y dividen el conocimiento tal y como lo conocemos. Tras haber sintetizado brevemente el contenido de los artículos presentes —puesto que su aportación no es importante solo con respecto al contenido en sí, sino además en la naturaleza académica de cada uno, que es radicalmente diferente a los demás—, cabe destacar esta obra por su heterogeneidad. La pluralidad de las autorías y el contenido altamente especializado pero contrapuesto a sus compañeros, puesto que el rango de temas abarcado es ejemplar, deja en evidencia el poder de innovación que es posible al reconsiderar la erudición tradicional en el ámbito de la traductología. La extrapolación y estudio de los métodos de procedimiento y reflexión utilizados en este campo concreto, como expresan de manera acertada sus editoras en esta monografía, demuestra que existen maneras de cuestionar y reinventar las humanidades, en pos de la colaboración, la inclusividad y la búsqueda de conocimiento de maneras alternativas a la vez que productivas y accesibles.