:: TRANS 26. ARTÍCULOS BIBLIOGRÁFICOS. Págs. 373-385 ::
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Pablo Ingberg
Investigador independiente
ORCID: 0000-0002-6941-9526
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La Editorial Losada empezó a publicar traducciones de piezas de Shakespeare en 1939 y llegó al último tomo de las Obras completas en 2009. Este artículo recorre la historia de ese proceso de setenta años: la parte atinente de la trayectoria de la editorial, cómo llegó a esas traducciones y quiénes intervinieron, quiénes fueron sus autores, cómo y cuándo se publicaron, cómo se fue organizando la edición de las Obras completas, cuáles fueron sus criterios y características. El objetivo principal es ofrecer una fuente para quienes busquen datos y referencias bibliográficas sobre las traducciones de obras de Shakespeare publicadas por Losada.
PALABRAS CLAVE: Shakespeare, Obras completas, traducción, Losada.
A history of Shakespeare in Losa
The publishing house Editorial Losada started to publish translations of Shakespeare’s works in 1939, and reached the last volume of his Complete Works in 2009. This article looks through the history of that seventy-year-long process: the relating part of the publishing house path, how it arrived at those translations and who intervened, who their authors were, how and when they got published, how the edition of the Complete Works was organized, what their criteria and features were. The main goal is to offer a source to whoever searches for data and bibliographical references on the Spanish translations of Shakespeare’s works published by Losada.
key words: Shakespeare, Complete Works, translation, Losada.
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recibido en enero de 2022 aceptado en septiembre de 20221
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fuentes
La Editorial Losada empezó a publicar traducciones de piezas de Shakespeare en 1939 y llegó al último tomo de las Obras completas en 2009. Del tramo final de ese proceso de setenta años fui parte y por lo tanto me baso en mi experiencia directa, con apoyo en datos bibliográficos. Para el tramo intermedio, divisible a su vez en dos etapas, en la segunda de las cuales llegué a participar, obtuve testimonios de participantes directos e indirectos, con respaldo en investigación y datos bibliográficos. Especialmente para el tramo inicial, acudí además a la bibliografía detallada en la sección correspondiente. Pido disculpas por la dosis inevitablemente elevada de autorreferencialidad: sólo pretendo poner a disposición algunos datos que de otro modo sería difícil y a veces quizás imposible conseguir.
Primera etapa
Una de las varias editoriales creadas por exiliados españoles en Hispanoamérica, Losada se funda en 1938. El madrileño Gonzalo Losada (1894-1981), arribado a Buenos Aires en 1928 para trabajar en la dirección argentina de Espasa-Calpe, transforma ésta en sociedad anónima en 1937, pero, ante imposiciones que le llegan de España, en 1938 decide renunciar y dar inicio a la editorial que lleva por nombre su apellido. Entre sus destacados colaboradores de los primeros tiempos, el dominicano residente en Argentina Pedro Henríquez Ureña (1884-1946) se hizo cargo de la colección Las obras maestras de la literatura y del pensamiento universal. Muy pronto aparecen allí dos volúmenes con piezas de Shakespeare: en 1939, uno con Romeo y Julieta y Otelo; y en 1940, otro con Hamlet “en sus tres versiones”, esto es, en lugar de la habitual combinación de los textos de las ediciones segunda en cuarto de 1604 y primera en folio de 1623, se ofrece la traducción de la de 1604 más una suerte de apéndice donde Henríquez Ureña presenta las diferencias con la de 1623, además de la primera y hasta hoy única traducción castellana, hasta donde sé, de la versión de la primera edición en cuarto de 1603, 40 % más breve que cualquiera de las otras dos. Ambos volúmenes incluían sendas introducciones del director de la colección: el primero, Romeo y Julieta – Otelo, uno sobre la obra de Shakespeare en general; el segundo, uno sobre Hamlet en particular. Para las tres piezas, Romeo y Julieta, Otelo y Hamlet de 1604, se utilizaron las traducciones de Guillermo Macpherson (1824-1898) en endecasílabos. Nacido durante un breve exilio familiar en Gibraltar, el gaditano de padre escocés Macpherson había dado a conocer a partir de 1873 sus traducciones de 23 piezas de Shakespeare. La traducción del Hamlet de 1603, nueva y en prosa, fue realizada por el escritor y traductor argentino Patricio Canto (1918-1989). Estos dos libros siguieron reimprimiéndose durante años, a partir de cierto punto dentro de la colección Biblioteca Clásica y Contemporánea, que fue absorbiendo títulos de Las obras maestras de la literatura y del pensamiento universal.
Segunda etapa
En 1964 se producen dos incorporaciones significativas, que marcan el comienzo del rumbo futuro: dos reconocidos escritores aportan nuevas traducciones. El argentino Manuel Mujica Lainez (1910-1984), que había dado a luz en 1963 su traducción de Cincuenta sonetos de Shakespeare por Ediciones Culturales Argentinas, la ofrece a Losada, donde aparece con el título Sonetos, reducidos de 50 a 48. Por otra parte, el chileno Pablo Neruda (1904-1973), muy amigo de su editor Gonzalo Losada, le da a publicar una traducción de Romeo y Julieta, preparada especialmente para el Instituto del Teatro de la Universidad de Chile, cuyos alumnos la estrenaron en Santiago el sábado 10 de octubre de 1964. Según se estila en versiones para la representación, Neruda recortó más de 600 líneas entre verso y prosa, alrededor de un 20 % del total; a su vez, agregó unos poquitos versos de su propio cuño. Esa traducción remplazó a partir de allí a la de Macpherson, cuyo Otelo siguió reimprimiéndose, desde entonces, ya sin la compañía de Romeo y Julieta. Las traducciones de Mujica Lainez y Neruda también se reimprimieron luego numerosas veces, y continúan publicándose hasta hoy, a partir de cierto punto con los agregados necesarios para completarlas, como se verá.
Intermedio institucional
Fallecido don Gonzalo Losada en 1981, se hace cargo de la editorial su hijo homónimo. Tras unos años de dificultades económicas crecientes, en 1989 toma las riendas de la empresa el asturiano radicado en Argentina José Juan Fernández Reguera (1948), que al año siguiente adquiere la mayoría accionaria y es designado presidente de la compañía, un puesto que ha ocupado sin interrupción desde entonces hasta la actualidad.
Tercera etapa
Por consejo y gestión de Jorge Lafforgue (1935-2022), entonces asesor de la editorial, empiezan a sumarse traducciones de dos reconocidas figuras de las letras uruguayas. La primera, en 1994, fue Noche de Reyes en traducción del ensayista y profesor Emir Rodríguez Monegal (1921-1985), preparada en 1964 (en ocasión del cuarto centenario del nacimiento de Shakespeare) para la Comedia Nacional de Montevideo, con traducción de las canciones a cargo del escritor uruguayo Mario Benedetti (1920-2009). Junto con el Hamlet breve de Patricio Canto, ésta es la única traducción entre las publicadas por Losada que vierte los pentámetros yámbicos en prosa. Al año siguiente, 1995, aparece Macbeth en traducción de la poeta Idea Vilariño (1920-2009), de quien irían agregándose otras cuatro: Sueño de una noche de verano (1997), Medida por medida (2000), Rey Lear (2003) y Julio César (2004). Algunas piezas de Shakespeare traducidas por Vilariño, en buena parte no de las publicadas luego por Losada, habían sido llevadas al escenario (la primera, un Hamlet en colaboración con Rodríguez Monegal, en 1964), se habían publicado en Uruguay (Hamlet, Macbeth, La tempestad) y habían recibido el premio Florencio de la crítica teatral uruguaya a la mejor traducción (Antonio y Cleopatra, 1969; Sueño de una noche de verano, 1972; Julio César, 1975).
En 1997 se suma a los Shakespeares de Losada un Ricardo III en traducción de la poeta, ensayista y profesora argentina Cristina Piña (1949). Esta traducción, preparada inicialmente para su representación en el Teatro General San Martín de la ciudad de Buenos Aires en 1996, con dirección de Agustín Alezzo y actuación protagónica de Alfredo Alcón, fue destacada ese año en el Premio Teatro del Mundo, otorgado por un equipo de investigadores del Centro Cultural Ricardo Rojas de la Universidad de Buenos Aires (premio en el que Piña sería destacada luego otras varias veces, y una vez premiada por una pieza de Tennessee Williams publicada por Losada; recibiría por su trayectoria en traducción, además, el Premio Konex de Platino 2014).
En 1998, cuando yo estaba haciendo mis primeras traducciones para Losada (Edipo rey y Antígona de Sófocles), el asesor editorial de ese momento, Jorge Tula (1939-2008), me dijo que tenían planes de completar las obras de Shakespeare con traducciones hechas por escritores y me preguntó si no quería hacer alguna. Propuse La tempestad, la traduje en 1999, se publicó en 2000 y obtuvo el Premio Teatro del Mundo a la mejor traducción teatral representada o publicada ese año en Buenos Aires.
La idea de completar Shakespeare fue de Fernández Reguera, quien en la librería de Losada oía con frecuencia a personas que solicitaban alguna edición de las Obras completas en castellano y se sorprendían mucho de que no hubiera ninguna: la última reimpresión de la única existente hasta ese momento, la traducción de Luis Astrana Marín (1889-1959) publicada por Aguilar, llevaba décadas agotada.
La idea de que las traducciones continuaran siendo hechas por escritores (como venían siendo: Mujica Lainez, Neruda, Rodríguez Monegal, Vilariño, Piña) no fue de Fernández Reguera. Tula me la transmitió en la primera mitad de 1998. Hacia fines del año siguiente, 1999, empezó a aparecer, con vasta repercusión en la prensa, la colección Shakespeare por escritores del Grupo Editorial Norma, dirigida por el escritor y traductor argentino Marcelo Cohen (1951), quien por esos tiempos había estado publicando algunas traducciones en Losada (Poemas de Fernando Pessoa, 1997; La trágica historia del doctor Fausto de Christopher Marlowe, 1998 —aparecida antes en España—). Si se trató de una mera coincidencia de proyectos con una similitud de base (todo Shakespeare traducido por escritores) o alguno de los dos se inspiró en el otro, no es algo sobre lo que yo esté en condiciones de ofrecer ninguna certeza. Hace unos años le conté a Cohen, muy al pasar, lo que me había dicho Tula en 1998 y él reaccionó con cierto enojo, como dando a entender que Tula le había tomado la idea; pero Tula ya no estaba para darme su versión. En cualquier caso, fuera de aquella similitud de base en absoluto desatendible, se trata de dos proyectos muy distintos: el de Norma apunta a una diversidad de voces y registros y variedades regionales mucho mayor; el de Losada es en ese aspecto mucho más concentrado (seis traducciones uruguayas, una chilena, las demás argentinas) y recurrió en todos los casos a personas que, además de ser escritoras, tenían detrás una cierta trayectoria en traducción (incluyendo, desde un principio y en su medida, a Mujica Lainez y Neruda). Los resultados también son, por ende, muy distintos, más allá del valor que unos u otros prefieran atribuir a unos u otros.
Cuarta etapa–primera parte
A fines de 2000, cuando Jorge Tula ya no estaba en la editorial y nadie lo había remplazado, Fernández Reguera me convoca para seguir traduciendo piezas de Shakespeare, trabajo que concentraría buena parte de mi tiempo laboral durante la siguiente década. Comencé en ese momento a traducir a un promedio de entre tres y cuatro obras al año, que sin embargo no empezaron a salir a la luz hasta fines de 2003, cuando en un lapso de unos veinte meses se publicaron doce, todas ellas destacadas en el Premio Teatro del Mundo 2004 (Enrique IV – Primera parte, Enrique IV – Segunda parte, La comedia de los errores, Tito Andrónico) y 2005 (El mercader de Venecia, Los dos caballeros de Verona, Antonio y Cleopatra, Pericles, príncipe de Tiro, Timón de Atenas, Como gustéis, Mucho ruido y pocas nueces, Coriolano). En medio de esa andanada de publicaciones, la Biblioteca Clásica y Contemporánea pasó a llamarse Losada Clásica.
Por ese entonces, Fernández Reguera me plantea su objetivo de llegar a tener en Losada, además de los volúmenes individuales, unas Obras completas de Shakespeare. Luego de estudiar el asunto, le propuse organizarlas en cuatro tomos de tamaño similar, alrededor de mil páginas cada uno: Tragedias, Comedias, Comedias sombrías – Dramas romancescos – Poemas, Dramas históricos. A su pedido, me concentré primero en las tragedias, cuyo tomo era el que estábamos más cerca de completar, y convoqué a otras personas para que se sumaran al trabajo de traducción: la mencionada Cristina Piña y la poeta y traductora argentina Delia Pasini (1945-2018, Premio Teatro del Mundo 2003 por su traducción del Teatro completo de Oscar Wilde para Losada). Cada obra que entregábamos se iba publicando en un volumen individual de Losada Clásica. Por mi parte, además de traducir y coordinar el proyecto, me encargaba de revisar y corregir pruebas de las otras traducciones, incluyendo las anteriores que se reeditaban.
En ese momento, hubo que decidir qué hacer con las primeras traducciones de Shakespeare publicadas por Losada:
Intermedio paralelo
En 2005-2006, una editorial creada ad hoc en Barcelona, Vitae Ediciones, publicó una “Biblioteca William Shakespeare” para venta en quioscos con traducciones cedidas por Losada. El folleto que acompañó el lanzamiento anunciaba con grandes letras en su página 3:
La Biblioteca William Shakespeare reúne por primera vez en quioscos todas las obras maestras del genio de la Literatura Universal.
- Ediciones prologadas y anotadas por los mejores especialistas.
- Los mejores traductores, entre los que destacan el Premio Nobel Pablo Neruda y el gran escritor argentino Mujica Lainez.
- Un total de 26 títulos, lujosamente encuadernados en símil piel.
La serie, sin embargo, se detuvo a los 16 títulos. He encontrado otros dos con registro de ISBN, pero ninguna prueba de que se hayan impreso. Al final acompaño la lista entera.
De cada uno de los 16 títulos publicados, se imprimieron en Barcelona varias decenas de miles de ejemplares para la venta en quioscos de España y Argentina (el remanente se vendió luego en mesas de saldos de librerías), cifras impensables para los canales más habituales de estos libros.
Cuarta etapa – segunda parte
En esos mismos dos años, 2005-2006, terminé de delinear los contenidos de cada tomo:
Para las últimas traducciones se sumaron en 2007-2008 los mencionados Alejandro Bekes (Venus y Adonis – Poemas diversos) y Lucas Margarit (Enrique VIII). A lo largo del proceso, algunos de los volúmenes individuales se imprimieron en España (Antonio y Cleopatra, Macbeth), pero la mayoría se imprimió en Argentina. Varios, los más populares de siempre, tuvieron reimpresiones (Hamlet, Macbeth, Romeo y Julieta, La tempestad, Ricardo III, El mercader de Venecia, las dos partes de Enrique IV, Sueño de una noche de verano).
Finalmente, en 2008 aparecen los tres primeros tomos de las Obras completas:I. Tragedias, II. Comedias y III. Comedias sombrías – Dramas romancescos – Poemas, y en 2009, el último: IV. Dramas romancescos, todos impresos con tapa dura en Barcelona, donde en 2012 se reimprimiría en rústica Tragedias. Por la “labor de edición” de los últimos dos tomos resulté destacado en el Premio Teatro del Mundo 2009. También en 2012, se publicaron los cuatro tomos en México, en coedición de Losada con el Conaculta.
En 2011 aparecería mi traducción de Eduardo III destacada en el Premio Teatro del Mundo 2012), pieza admitida más recientemente en el canon no sin controversias, con la idea de incorporarla en futuras reediciones del tomo de Dramas históricos.
Obras completas
La publicación de las Obras completas de Shakespeare por Editorial Losada en 2008-2009 volvió a poner en circulación una publicación de esas características luego de décadas de ausencia en el mercado del libro, y sigue siendo la única compilación castellana completa con contenidos producidos en su totalidad fuera de España y la única, a diferencia de las enumeradas a continuación, en ser llevada adelante por una empresa pequeña o mediana independiente de todo grupo editorial, sobreviviente de otras épocas menos corporativas. En el tiempo sólo se le adelantó apenas (2007) y en parte (no incluye los poemas) el Teatro completo, al cuidado del profesor y traductor español Ángel-Luis Pujante (1944), publicado por Galaxia Gutenberg-Círculo de Lectores, del grupo Planeta, “una edición cara y lujosa, con una selección de traducciones verdaderamente ecléctica que se remonta al siglo XVIII” (Zaro, 2017, p. 352), esto es, una amplia recolección de traducciones en su gran mayoría preexistentes y un libro con circulación bastante restringida. Le siguió otra edición del Teatro completo (es decir, nuevamente, sin los poemas) a cargo del mismo Pujante, en este caso además como traductor mayoritario y con acompañamiento final de más colegas para completar la colección, publicada por Espasa, también del grupo Planeta, en tres tomos: Tragedias, 2010; Comedias y tragicomedias, 2012, y Dramas históricos, 2015, con todas las traducciones en verso libre y con distribución lamentablemente bastante escasa. Esa edición guarda algunas vagas semejanzas con la de Losada: es la conclusión de un proceso más o menos extendido en el tiempo, con una buena parte de las traducciones a cargo de un mismo traductor, que fungió además de editor, y con el agregado de colegas hacia el final para acelerar el completamiento de las traducciones. Más o menos contemporáneamente, en 2012-2013, apareció también otra edición de la Obra completa (esta sí con los poemas incluidos) por Debolsillo en cinco tomos: Comedias, Tragedias, Dramas históricos, Romances y Poesías, reeditada en 2016 en la Colección Penguin Clásicos del mismo grupo (Penguin Random House). Esa edición estuvo al cuidado del editor, profesor y traductor español Andreu Jaume (1977) y, a semejanza de la compilación de Pujante para Gutenberg, recoge casi en su totalidad traducciones preexistentes, desde una del poeta español Luis Cernuda (1902-1963) publicada en 1953 y dos de las varias realizadas en prosa por el poeta, traductor y profesor español José María Valverde (1926-1996) para Planeta en 1967-1968, hasta una buena cantidad de las realizadas para el proyecto Shakespeare por escritores dirigido por Marcelo Cohen. Existió la intención de incluir allí algunas de las traducciones de Idea Vilariño publicadas por Losada, pero Losada se negó a cederlas. Fuera de las dos traducciones de Valverde mayormente en prosa, las restantes son en verso, sea endecasílabo o libre.
Criterios de traducción
Por incluir algunas traducciones realizadas hasta más de treinta años antes de que empezara a pensarse en un proyecto de Obras completas, las de Losada no podrían responder en su totalidad a criterios establecidos de antemano. Pero tampoco resultó necesario sentar criterios muy definidos con las personas que se incorporaron desde que empecé a ocuparme del plan de obras completas, porque todas ellas traían su experiencia y siempre hubo ciertos acuerdos básicos generales, tácitos o explícitos.
Salvo la traducción de Rodríguez Monegal, que, como ya dije, traduce el verso en prosa (excepto las canciones, traducidas por Mario Benedetti), todas las demás lo traducen en verso: Mujica Láinez, Neruda y Vilariño, según la usanza más tradicional, vierten los pentámetros yámbicos en endecasílabos; Bekes y yo, en alejandrinos; Piña, Pasini y Margarit, en verso libre. Las traducciones en alejandrinos y en verso libre siguen a los pentámetros yámbicos originales uno a uno, al igual que la versión de los sonetos por Mujica Lainez en endecasílabos (por la obvia razón de que si tuvieran otro número de versos, dejarían de ser sonetos), mientras que las traducciones de las piezas teatrales en endecasílabos, como las de Neruda y Vilariño, incrementan a veces un poco la cantidad de versos, porque en el paso del monosilábico inglés al polisilábico castellano se agregan inexorablemente sílabas (la solución alternativa, aplicada por Mujica Lainez, es recurrir por momentos a la síntesis o al mínimo recorte).
La forma de trato a la segunda persona del singular reclama un previo párrafo aparte. Como expuse en las introducciones a los volúmenes individuales desde la primera de mis traducciones (La tempestad, 2000), Shakespeare emplea: a) para el trato de confianza, el thou hoy arcaico en inglés, digamos equivalente al «tú» castellano para todos los hablantes de esa época y a los actuales “tú” para alrededor del 90 % de los hablantes y “vos (sabés)” para el 10 % restante (Argentina, etc.); b) para el trato de respeto, el you (actualmente forma inglesa única tanto para el trato de confianza como para el de respeto), digamos equivalente, hoy, al “usted” que emplea la totalidad de los castellanohablantes, pero que no existía o era apenas incipiente en tiempos de Shakespeare, y a su vez equivalente, en aquella época, al “vos (sabéis)”, ahora arcaico para todos los castellanohablantes. Sin embargo, a pesar de que en la España actual ese “vos (sabéis)” no se utiliza y es por lo tanto tan arcaico como en cualquier otro país o región del mundo castellanohablante, he observado hasta el cansancio que se lo considera una supuesta “norma española”, esto es, del actual castellano de España. Muy por el contrario, cuando una traducción hecha en España utiliza hoy ese “vos” arcaico, está haciendo exactamente lo mismo que una traducción hecha en México o en Argentina: emplear una forma de trato de otra época, sin vigencia actual en ningún país ni región. Se trata, pues, de una operación netamente diacrónica (temporal), no diatópica (espacial), que iguala a ese respecto a las traducciones realizadas en todo el mundo castellanohablante desde que el “vos (sabéis)” pasó a ser un arcaísmo urbi et orbi. En cuanto a la segunda persona del plural, el “vosotros” que usa hoy el 10 % de los castellanohablantes (casi toda España) era la forma de trato común a todo el ámbito castellanohablante en tiempos de Shakespeare, de modo que emplearla en una traducción realizada fuera de España, en este caso concreto, no implica adherir a una “norma española”, es decir, una operación diatópica, sino acudir al uso común en aquella época, una operación diacrónica.
En este rubro, todas las traducciones incluidas en las Obras completas de Losada realizan esa operación diacrónica: utilizan las formas “tú”, “vos (sabéis)” y “vosotros” del castellano hablado y escrito en tiempos de Shakespeare, tanto en España como en sus colonias americanas de entonces. La única excepción parcial son los sonetos traducidos por Mujica Lainez, quien vierte indistintamente tanto el thou como el you con “tú”, sin establecer, por ende, diferencias entre el trato de confianza y el de respeto.
En cuanto a variedad diatópica, todas las traducciones de Losada emplean una lengua a grandes rasgos del Cono Sur, como es más o menos inexorable en personas nacidas y criadas y crecidas en esta región, con algún que otro mínimo detalle diacrónico, historizante, para contribuir a la idea de que se trata de una obra antigua, en consonancia con lo dicho sobre las formas del trato y con los contenidos mismos de las obras: por dar un ejemplo grueso de esto último, todas las referencias a la monarquía y a títulos nobiliarios, profusas en Shakespeare, hoy nos suenan inexorablemente a otra época, sobre todo fuera de España, única monarquía en el mundo castellanohablante actual (y hoy incluso con formas muy distintas de las de la monarquía de hace siglos). En nuestras traducciones se verán, entonces, algunos toques antiguos afines a estos del español Pujante en Hamlet (Shakespeare, 1996, pp. 121, 127, 132, 135, 145): “golfa”, “afeites”, “yantar”, “faraute”, “voto a...”; pero nunca se verán españolismos como estos de la misma traducción de Pujante: profusos leísmos (pp. 71, 77, 99, 129, 131, 149, 156, 259, 161, 162, 176, 183, 198), un loísmo (p. 202), el participio “cogida” para traducir caught up (p. 119) o el fraseo “tú es que eres...” (p. 184).
En cualquier caso, más que en esos ropajes varietales a los que para mi gusto se les presta más atención de la que merecen (siempre es más fácil ver el traje de alguien que si es inteligente o buena persona), las traducciones de las obras de Shakespeare publicadas por Losada, desde las de Mujica Lainez y Neruda hasta las de quienes completamos el trabajo, estuvieron siempre enfocadas en los valores literarios y dramáticos del texto; en palabras de Beckett, en tratar de “fracasar mejor” que los predecesores. En qué medida se logró no es algo que me quepa a mí decir, porque por ser parte estoy descalificado como juez.
referencias
(Con aclaración, entre corchetes, del tema referido en cada caso)
Bartalini, C. (2020). Idea Vilariño: una poética del despojo. Literatura: teoría, historia, crítica, 22(2), 97-125. [Idea Vilariño]
Gallo, G. S. M. (2004). Manuel Mujica Lainez: el amplio gesto de la narración En N. Jitrik (Ed.). Historia Crítica de la Literatura Argentina. Vol. 9 (pp. 483-499). Emecé. [Mujica Lainez]
Gudiño Kieffer, E. e Ingberg, P. (2010). La editorial Losada: Una historia abierta desde 1938. Losada. [Historia de Editorial Losada]
Guerriero, L. (2013). Pedro Henríquez Ureña (1884-1946). El extranjero. En Plano americano. UDP. [Henríquez Ureña]
Irigaray, J. I (21 de septiembre de 2013). La trinchera editorial del exilio español. El Mundo. https://www.elmundo.es/america/2013/09/20/argentina/1379695566.html?a=VODfcb603db6dad36badb2058baa65ef272&t=1379717208&numero= [Fernández Reguera - Obras completas en Losada]
Larraz, F. (2016). Semblanza de Gonzalo Losada Benítez (1894-1981). En Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes. Portal Editores y Editoriales Iberoamericanos (siglos XIX-XXI). EDI-RED: http://http://www.cervantesvirtual.com/obra/gonzalo-losada-benitez-madrid-1894---buenos-aires-1981-semblanza/ [Gonzalo Losada]
López, C. J. Idea Vilariño (Uruguay) y Helena Kolody (Brasil): cantos a la vida. Encuentros poéticos en América Latina (Tesis doctoral). Universidad de Vigo]. http://www.investigo.biblioteca.uvigo.es/xmlui/bitstream/handle/11093/1425/Lopez_CristianJavier_TD_2019_AA.pdf?sequence=4&isAllowed=y [Idea Vilariño]
Mattoni, S. (8 de junio de 2000). Una nueva lengua para Shakespeare. La Voz del Interior. https://lamaquinadeltiempo.com/online/traducc04/ [Marcelo Cohen - Shakespeare por escritores]
Mecca, D. (28 de julio de 2017). Estela y su hermano Patricio: canto de literatura e izquierda. Clarín. https://www.clarin.com/cultura/estela-hermano-patricio-canto-literatura-izquierda_0_SJ-gkPASb.html [Patricio Canto]
Pujante, A.-L. y Campillo, L. (eds.) (2007). Shakespeare en España: Textos 1764-1916. Universidad de Murcia-Universidad de Granada. [Macpherson]
Shakespeare, W. (1996), Hamlet. Trad. de Á.-L. Pujante. Espasa Calpe.
Ulloa Cárdenas, D. (s/f). Romeo y Julieta, según Neruda. Significado actual. https://www.escritores.org/recursos-para-escritores/recursos-1/colaboraciones/3726-romeo-y-julieta-segun-neruda?dt=1641755151278 [Neruda]
Zaro, J. J. (2017). Nacionalidad y legitimación en las últimas compilaciones de traducciones de Shakespeare al castellano. El taco en la brea, 4(5), 345-358. [Ediciones de las Obras completas]
Apéndice I
Distribución de las traducciones
Teatro
Ingberg: 18 + 20 % de Romeo y Julieta (+ Eduardo III)
Pasini: 8
Vilariño: 5
Piña: 4
Monegal: 1
Margarit: 1
Neruda: 1 (-20 %)
Poesía
Ingberg: 1 + 70 % de Sonetos
Bekes: 1
M. Lainez: 30 % de Sonetos
Apéndice II
Volúmenes individuales
(por orden alfabético)
Apéndice III
Vitae Ediciones: Biblioteca William Shakespeare
(volúmenes individuales con traducciones de Losada, por orden de aparición)
Títulos con ISBN pero sin constancia de que se hayan impreso:
Apéndice IV
OBRAS COMPLETAS
I. TRAGEDIAS
Introducción general
Pedro Henríquez Ureña
La tragedia shakespeareana
Laura Cerrato
Entrevista al director teatral
Raúl Serrano Jorge Dubatti
Tito Andrónico
Pablo Ingberg
Romeo y Julieta
Pablo Neruda + Pablo Ingberg
Julio César
Idea Vilariño
Hamlet
Pablo Ingberg
Otelo
Delia Pasini
Rey Lear
Idea Vilariño
Macbeth
Idea Vilariño
Antonio y Cleopatra
Pablo Ingberg
Coriolano
Pablo Ingberg
Timón de Atenas
Pablo Ingberg
II. COMEDIAS
Introducción general
Pedro Henríquez Ureña
La comedia shakespeareana
Laura Cerrato
Entrevista al director teatral David Amitín
Jorge Dubatti
Los dos caballeros de Verona
Pablo Ingberg
La doma de la fiera
Cristina Piña
La comedia de los errores
Pablo Ingberg
Trabajos de amor perdidos
Delia Pasini
Sueño de una noche de verano
Idea Vilariño
El mercader de Venecia
Pablo Ingberg
Las esposas alegres de Windsor
Pablo Ingberg
Mucho ruido y pocas nueces
Pablo Ingberg
Como gustéis
Pablo Ingberg
Noche de Reyes
Emir Rodríguez Monegal
III. COMEDIAS SOMBRÍAS – DRAMAS ROMANCESCOS – POEMAS
Introducción general
Pedro Henríquez Ureña
Comedias sombrías y dramas romancescos
María Eugenia Bestani
Los poemas
M. E. Bestani y A. Bekes
Troilo y Crésida
Pablo Ingberg
Bien está lo que bien acaba
Pablo Ingberg
Medida por medida
Idea Vilariño
Pericles, príncipe de Tiro
Pablo Ingberg
Cimbelino
Cristina Piña
Cuento de invierno
Delia Pasini
La tempestad
Pablo Ingberg
Los dos nobles parientes
Cristina Piña
Venus y Adonis – Poemas diversos
Alejandro Bekes
La violación de Lucrecia
Pablo Ingberg
Sonetos.
M. Mujica Lainez + P. Ingberg
IV. DRAMAS HISTÓRICOS
Introducción general
Pedro Henríquez Ureña
Los dramas históricos shakespeareanos
Lucas Margarit
Enrique VI – Primera parte
Delia Pasini
Enrique VI – Segunda parte
Delia Pasini
Enrique VI – Tercera parte
Delia Pasini
Ricardo III
Cristina Piña
Rey Juan
Pablo Ingberg
Ricardo II
Delia Pasini
Enrique IV – Primera parte
Pablo Ingberg
Enrique IV – Segunda parte
Pablo Ingberg
Enrique V
Delia Pasini
Enrique VIII
Lucas Margarit