La vida al por menor. Cultura material de moriscos y cristianos viejos en la Castilla del siglo XVI
MORENO DÍAZ DEL CAMPO, Francisco Javier
Universitat de València, Valencia, 2023
ISBN: 978-84-1118-255-3
El estudio de la cultura material está teniendo un auge en los últimos años. La cualidad que presentan los objetos para determinar no solo modos de vida, sino también de hacernos conocer las identidades de quienes lo poseyeron, está siendo uno de los acicates para que estos inventarios y los artefactos que en ellos aparecen sean fuente de interés para historiadores, historiadores del arte o antropólogos. Este asunto es, si cabe, aún más interesante en el caso de las sociedades multiculturales y/o multiétnicas, pues permite conocer las particularidades de cada uno de los grupos poblacionales. Hasta hace bien poco, el análisis de los objetos contenidos en los inventarios post mortem o dotes, por citar dos tipologías de fuentes, habían sido estudiados de modo independiente, esto es, por un lado, el de los cristianos y, por otro, el de los moriscos (cristianos nuevos del islam), por citar un ejemplo. La intención real no era únicamente, como se ha dicho, conocer la vida cotidiana de quienes los poseyeron, sino, sobre todo, construir la diferencia. Desde el siglo XIX, o incluso algunas décadas antes, estos objetos sirvieron para «marcar» una identidad opuesta de unos frente a otros, como si hubiera un modo de vida «cristiano viejo», radicalmente distinto –por necesidad– al morisco siguiendo los postulados de los apologistas de la expulsión. Por suerte, en los últimos años, gracias a grupos de investigación como el de M.ª Elena Díez Jorge, o a las aportaciones de otros historiadores como Juan Vicente García Marsilla, por citar algunos casos, esta tendencia está cambiando. Esta nueva generación de investigadores e investigadoras no busca la diferencia, sino retratar una sociedad donde los intercambios comerciales y las identidades fueron, en muchas ocasiones, fluidas y cambiantes, tanto en geografía como en cronología. No existe una foto fija, estática ni estereotipada.
Dentro de esta tendencia debemos enmarcar el libro que aquí se reseña. El profesor Moreno Díaz del Campo, experto reconocido en la historia de los moriscos, ha publicado una verdadera joya para quienes nos dedicamos al análisis de la sociedad hispánica del siglo XVI. A través de una cantidad ingente de fuentes es capaz de replantear todas las cuestiones que he citado al inicio de esta reseña. Lo que vemos aquí es el primer estudio global de la cultura material castellana del siglo XVI donde están estudiados al mismo nivel, sin jerarquías, porque fue así como fueron percibidos (y usados) estos artefactos, sean tapices, camas, objetos de menaje, etc. La obra está estructurada a través de distintas preguntas de investigación que cuestionan la visión monolítica, plana y mediatizada de los pocos que le precedieron en tal tarea. Estas preguntas marcan un estudio metodológicamente impecable, donde se combina lo cuantitativo (el número de gráficas es apabullante) con lo cualitativo: qué se tiene, por qué se tiene, cómo se usa y qué valor (monetario y emotivo) presentan. Es por ello que bascula entre una historia económica y una historia social.
A su vez, es un ejercicio de microhistoria, pues hace un necesario zoom en el área castellana, a fin de poder estudiar de modo coherente y profundo la extensa documentación de tal territorio. Todo ello es combinado con una historia comparada de los objetos, abriendo unas líneas marco para que, en el futuro, y esperamos que sea así, se pueda hacer lo mismo en otros enclaves donde no se han desarrollado estudios de esta índole, como por ejemplo, el Antiguo Reino de Valencia.
Creemos que esta obra parte de una evolución natural de la biografía científica del autor, quien en su tesis estudió las comunidades de cristianos nuevos de La Mancha (publicada,más tarde, a modo de monográfico en el CSIC), la percepción física y representación visual de los moriscos en territorio peninsular (en este caso con una obra editada por Cátedra) y ahora cierra el ciclo con este libro donde vuelve al territorio que más conoce y analiza concienzudamente los objetos que tales cristianos viejos y nuevos consumieron, no como algo propio de su comunidad, sino como parte de una cultura compartida. Aquí no se individualiza al «otro» para señalar, sino se muestra un paisaje común de intercambio y una apreciación de estos artefactos tras años de coexistencia y, por qué no decirlo, de asimilación, pues los moriscos castellanos, según las fuentes, fueron los que mejor se integraron al nuevo marco político de las conversiones iniciadas a inicios del XVI.
Es un libro que ofrece un trabajo generoso para quienes quieran seguir esta línea, pues incluye tal cantidad de fuentes primarias, que abre las puertas a otros investigadores a tirar de ellas, sin necesidad del gran número de horas que el autor ha dedicado a exhumar tales materiales. Aunque los documentos son parcos, Moreno Díaz del Campo es capaz de sacarles el máximo partido, como demuestra, por ejemplo, el Pantone de colores de las vestimentas, sea de cristianas viejas que de moriscas.
Si alguna crítica puedo hacer a este libro es que la apabullante cantidad de documentación, a veces, deja en un segundo lugar la labor interpretativa, que se ve relegada, en algunas cuestiones, a una mera coda de la gráfica. Todo ello viene dado, a mi entender, por la necesidad de dar pruebas fehacientes de las hipótesis que baraja, frente a cierta historiografía que, con un par de documentos de archivo, estandariza los usos y costumbres de una sociedad tan compleja como la del siglo XVI.
Sin lugar a duda, este volumen va a ser una referencia obligada no solo a quienes nos dedicamos a las relaciones entre musulmanes, moriscos y cristianos en la edad moderna; sino también a cualquiera que quiera conocer la vida «al por menor» de la Castilla del XVI en particular, y de la península ibérica en general. Una aportación, en esencia, que a buen seguro marcará un antes y un después en la historiografía internacional de la historia de los objetos.
Borja Franco Llopis
UNED