Suárez Cortina, Manuel (2019), Los caballeros de la razón. Cultura institucionista y democracia parlamentaria en la España liberal, G9 ediciones, 375 págs. ISBN: 978-945814-6-5

¿Qué sucede cuando los hombres de ciencia de finales del siglo XIX e inicios del XX se interesan por los problemas de España y deciden oponerse al conservadurismo liberal dominante? El libro de Manuel Sánchez Cortina explora las opciones que tuvieron aquellos hombres que decidieron usar sus conocimientos científicos y su experiencia para poner en marcha un nuevo proyecto de organización social y política en uno de los momentos clave de nuestra historia nacional.

El libro refleja la búsqueda de alternativas a una ciudadanía anclada en el viejo Régimen y el empeño de la cultura institucionista en transformar la realidad de los españoles. Para lograrlo, y ofrecer una alternativa al conservadurismo liberal dominante, se servirá de las nuevas corrientes de pensamiento europeo y americano para dar un bagaje científico y cultural a las nuevas reformas de la sociedad española.

El texto analiza la filosofía krausista a la que atribuye un enfrentamiento directo con el orden social y político vigente durante las décadas cincuenta y sesenta del siglo XIX. Revisa además su concepto de la religión y de la moral y explora las alternativas que dicha corriente filosófica planteó a la hora de poner en marcha un nuevo orden, una nueva forma de entender la política nacional.

Ahonda el relato en el convencimiento de que los hombres tenían la obligación de aspirar a la perfección y afrontar los desafíos que la vida les pudiera plantear a través de la educación de sus ciudadanos y potenciar así tanto sus facultades físicas como espirituales. Un nuevo modo de entender las relaciones humanas que había que poner en marcha a través de las instituciones políticas, de ahí la importancia de aportar nuevas ideas a la organización del Estado y de sus instituciones.

En la consecución de dicho objetivo los institucionistas se enfrentaron a uno de los grandes factores que condicionaron la realidad cultural, social y política de los españoles, la cuestión religiosa. El texto analiza la tensión existente entre el catolicismo oficial controlado por el estado y los católicos liberales y demócratas que aspiraban a integrar las nuevas corrientes de pensamiento en España.

El modo según ellos de lograr dicho objetivo será la secularización de las diferentes esferas que forman parte de la actividad humana hasta lograr separar la iglesia del estado, amparados en la necesidad de garantizar tanto la libertad de conciencia como la libertad de culto. Se convierten así en portavoces de una nueva fe más racional que no encontrará acomodo en la iglesia oficial y que se fundamentará en la libre conciencia de las personas para hacer realidad sus ideales y desarrollarse como individuos.

Será en el terreno de la representación parlamentaria y en su afán por lograr un régimen verdaderamente representativo donde buscarán los apoyos necesarios para llevar a cabo sus reformas políticas. El texto repasa su idea de España, su defensa de la soberanía popular, sus enfrentamientos con los sectores conservadores y tradicionalistas y la evolución de su concepto del Estado y de la nación española.

El texto critica a los dirigentes de la Restauración a los que consideran responsables de la crisis de final de siglo y del declive de la nación española, y ahonda en el convencimiento de que, si el viejo sistema estaba pensado para el beneficio de unos pocos, resultaba imprescindible dotar al país de un nuevo orden representativo. Es entonces cuando se abre paso un republicanismo de cátedra, integrado por unas clases medias ilustradas y por una burguesía progresista que convive con el republicanismo de las clases populares y con sus intentos de lograr las ansiadas reformas a través de la acción colectiva y de la lucha de clases.

El libro repasa en definitiva las diferentes fases por las que atraviesa el proyecto reformista, el desarrollo de las corrientes republicanas surgidas durante dicho periodo, el alcance de los partidos políticos de raíz republicana con el auge del institucionismo y el papel que desempeñaron los intelectuales españoles en la política y en la regeneración nacional durante dicho período.

María Silas García Conde